Bosa (OR)

Bosa

Bosa, una joya sarda bañada por el río Temo, destaca con su pintoresca arquitectura de tonos pastel dominada por el imponente castillo de Malaspina. Este encantador pueblo se sitúa estratégicamente a orillas del único río navegable de Cerdeña, creando un escenario único a pocos kilómetros de su desembocadura.

Con raíces que se remontan a la época fenicia, Bosa ha vivido una historia marcada por la migración de su centro urbano desde la margen izquierda hasta las laderas del cerro Serravalle durante la Edad Media, en busca de resguardo ante las incursiones piratas y bajo la protección de los Malaspina.

Reconocida como ciudad real por los españoles, Bosa ha mantenido a lo largo del tiempo estrechos lazos con la Península Ibérica, lo que se refleja en su arquitectura y cultura.

El encanto de Bosa es innegable; calles empedradas y escalinatas llenas de historia como Sas Conzas y Sa Costa se reflejan en las apacibles aguas del río Temo. Aquí, aún hoy en día, es común ver a mujeres trabajando el filete en las puertas de sus casas, añadiendo un toque auténtico al ambiente.

Además, el mar que baña las costas de Bosa ha sido reconocido como uno de los más limpios de Italia por asociaciones medioambientales, atrayendo a amantes de la naturaleza y turistas preocupados por el bienestar del entorno marino.