El archipiélago de La Maddalena (con una extensión total de 49.3 km2) se sitúa cerca de la costa noroeste de Cerdeña, comprendiendo siete islas principales, sin contar las numerosas rocas e islotes. Estas islas se dividen en dos grupos: al sureste encontramos Maddalena, Caprera y S. Stefano; y al noroeste Spargi, Budelli, Razzoli y S. Maria. Entre estas últimas y el grupo de islas Lavezzi (Córcega) se encuentra el Estrecho de Bonifacio, marcando el límite entre las aguas territoriales italo-francesas.
Con una composición granítica similar a la zona de Gallura, la costa del archipiélago ofrece paisajes y vegetación espectaculares, convirtiéndolo en uno de los destinos más fascinantes del Mediterráneo tanto geográfica como turísticamente.
Los habitantes del archipiélago residen principalmente en la isla de Maddalena, dedicándose mayoritariamente a empleos públicos, comercio, pesca y actividades marítimas.
- La isla Maddalena ofrece instalaciones hoteleras de alta calidad para los visitantes.
- En S. Stefano y Caprera también se pueden encontrar opciones de alojamiento junto a un centro especializado en vela.
Estas islas, habitadas desde tiempos prehistóricos – evidenciado por hallazgos neolíticos como el refugio bajo la roca en la isla S. Stefano desde el cuarto milenio antes de Cristo – fueron conocidas en época romana como «Cuniculariae» (islas conejo). Desde entonces han sido consideradas un punto estratégico para las rutas marítimas del mar Tirreno.