Descubre la fascinante isla de S. Antìoco, la más grande entre las islas que rodean Cerdeña y la cuarta en tamaño en Italia después de Sicilia, Cerdeña y Elba.
Sant’Antìoco es el corazón de la isla, ubicado en las pintorescas laderas de la colina del Castillo, con una rica historia que se remonta a antiguas civilizaciones.
Este encantador lugar es el legado de Sùlcis (o Sulci), una antigua fundación fenicia del siglo VIII a.C., seguida por un asentamiento nurágico con restos de un nuraghe y un pueblo fortificado del siglo XVIII.
Bajo el dominio cartaginés, Sant’Antìoco prosperó gracias a los recursos minerales de Sùlcis-Iglesiente, siendo testigo de batallas históricas como la naval entre púnicos y romanos en el 258 a.C.
En tiempos del emperador Claudio, fue elevada al estatus de «municipium», consolidando su importancia como centro urbano en la región.
A lo largo de los siglos, Sant’Antìoco ha sido testigo de épocas turbulentas, desde invasiones sarracenas hasta períodos de abandono durante la Edad Media hasta el siglo XVIII.
En el corazón de la ciudad se encuentra la encantadora Piazza Italia, junto a una fuente romana llamada localmente «Is solus», construida como drenaje para una zona pantanosa pero sigue funcionando hasta hoy.
Explora via Eleonora d’Arborea para descubrir los vestigios de un mausoleo funerario republicano con elementos decorativos púnicos y una cámara sepulcral única conocida como «sa tribuna» o «sa presonedda».
